Y no extrañaras mi sonrisa,
porque no dejo de reír.
Y no extrañaras mis miradas,
porque ahora veo tan diferente.
Y no extrañaras mis palabras,
porque escribo siempre.
Y no extrañaras mis caricias,
porque cualquiera me puede imitar.
Y no extrañaras mis besos,
porque besar no es entregar.
Y no me extrañaras,
simplemente recordaras,
por un tiempo,
lo que debes olvidar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario