Mirándote,
recordando nuestras historias,
también aquellos malos ratos,
mis huidas sin victoria,
me siento ahora,
tan decepcionado.
Mírame,
frustrado y medicado,
abnegado tan aislado,
como un criminal.
Todos en algún momento,
intentamos escapar,
aunque no entendamos,
lo que nos permite lastimar,
sacrificando sueños,
confundiendo el bienestar.
Mírame,
frustrado y medicado,
abnegado tan aislado,
como un criminal.
Mirándote,
tan lejos como querías estar,
confundida en realidad,
devuelta al qué dirán,
obsequiando tu belleza,
a todos por igual.
Mírame,
frustrado y medicado,
abnegado tan aislado,
como un criminal.
Mírame,
confundido y dedicado,
entregado a dibujarte,
escondido entre letras,
convencido que me leerás,
como a un criminal.
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