De mañana,
la luz se cuela,
entre las ventanas.
Creo no haber descansado,
sentimientos atribulados,
se retuercen en mi cama.
Tu almohada vacía,
el aroma de tu piel,
perdido y olvidado.
Yo tratando,
de reconstruir el legado,
que nos fue arrebatado.
Y yo inventando,
el infierno al lamentar,
no tenerte a mi lado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario