Cuando tú me miras,
todo vuelve a empezar,
no existe tiempo o razón,
no recuerdo estancia o lugar.
Cuando tú me miras,
no puedo especular,
me llevas,
donde siempre quise estar.
Cuando tú me miras,
se rebozan mis miedos,
de virtudes y pasiones,
anima en mis oraciones.
Cuando tú me miras,
todo se conjuga,
apetece continuar,
dan ganas al delirar.
Cuando tú me miras,
me creo tan perfecto,
tan lleno de antojos y deseos,
contigo sé que no miento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario