Reflejo de tus actos,
Cabellos brillantes,
Prisma en tu mirada,
Tu aroma en madrugada.
Decidí llamarte,
Con nombres de estrellas,
Decidí librarme,
De la humillación de mis ganas.
Abrace tu cuerpo,
Arranque tus besos de mi almohada,
Dibuje tus pechos,
Pálidos, perfectos en desespero.
Me sumergí completo,
Navegue entre sombras,
Descubrí tu universo,
Profetice el retorno,
De tus noches sin mi cuerpo.
Me entregue cautivo,
Me sorprendí adicto,
Me acostumbre a tus dichos,
Me acogí en tus brazos.
Me declaro esclavo,
De tu sexo y tus ganas,
De tu lengua y las rabias
De tus uñas aun clavadas.