Eres,
la brisa que despierta en madrugada,
la caricia nunca dejada para mañana.
Eres,
el silencio sin incomodar,
luego de cada beso que das.
Mi pensamiento y deseo,
el instante por llegar,
hoy, pronto para albergar.
Conviertes,
cada mal rato en oportunidad.
Sigues sin cuestionar,
lo que contigo puedo disfrutar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario